En los últimos seis meses el estadio
Canalla fue escenario de cuatro episodios de violencia: Orión, Araujo, la
prensa y los hinchas en el juego ante Racing, y ahora el técnico Alfaro
padecieron la visita a Rosario. La secretaría de seguridad de la provincia
clausuró la platea del estadio pero la AFA fue más allá: le prohibió jugar con
público el partido de la quinta fecha ante Temperley.
Alejandro
Mangiaterra
| Cruz del Sur
La Asociación del Fútbol Argentino sancionó
a Rosario Central y no le permitirá jugar con público su próximo duelo como
local. Así el Canalla pagará por los reiterados hechos de violencia en su
estadio. La agresión del pasado sábado a Gustavo Alfaro fue determinante pero
el último de una serie de hechos. De todos modos, las incongruencias en las
sanciones y la superposición de la pena establecida por la casa madre del
fútbol y la secretaría de seguridad deportiva sembraron un panorama plagado de
dudas y críticas.